miércoles, 27 de julio de 2016

26 DE JULIO (1)

26 DE JULIO (Parte I)

Se dice que la historia se repite, y es curioso ver como se cumple. Hace unos días comentábamos que ya estábamos por fin en la jmj, que no nos lo creíamos. De nuevo, hoy se ha cumplido. Ya estamos en Crackovia. Hoy se ha inaugurado la JMJ. En Mayúsculas. El fin de una peregrinación y el comienzo de otra. Y sin embargo, todo es un proceso, un camino (como ya dijo el bueno de Machado). Creo que entenderíamos de manera muy distinta lo que vivimos y vamos a vivir si no lleváramos ya una semana peregrinando por Europa, cada vez con mas gente. Pero este es nuestro Santiago, nuestra Roma y nuestra Jerusalen. Desde luego, el viaje ya me ha cambiado.
Testimonios, eucaristías y oraciones personales me han ayudado a rezar de otra manera, a intentar vivir de otra manera. He tenido tiempo también de experimentar la corrección fraterna, que, aunque en el momento duela, un toque de atención te ayuda a cambiar de actitud. Y hoy es el culmen de este viaje. En la eucaristía de apertura, tres preguntas. 
¿De donde venimos? De Madrid, de la parroquia del Santo Niño de Cebú, de vosotros que nos leéis, de nuestras familias y amigos, de casas y tradiciones. Pero también de la iglesia universal, de una historia y de un recorrido.
¿Donde estamos? Estamos en una peregrinación continua, en este momento física y espiritual. Estamos cada uno en un momento vital, pero viviendo todos lo mismo. De hecho, espero que estemos cumpliendo, y que vosotros, nuestra parroquia, podáis vivir también la jmj. Estamos viviendo una experiencia con jóvenes de todo el mundo, pero no solo con ellos: con sus parroquias, con sus carismas, con sus vivencias; franciscanos, carmelitas, diocesanos... Y espero que en estos días podamos acercarnos mas a los demás, no quedarnos en nosotros mismos, y compartir mas y mejores momentos.
Y la última, ¿a donde vamos? ¿Para que sirve? Tal vez la mas obvia, pero a la vez, la mas difícil de responder. Hay que vivirlo al fin y al cabo. Como dijo hoy el obispo y en su tiempo escribió San Pablo, "Nada nos separara del amor de Dios; Hay que difundir esta idea por el mundo, hay que dar testimonio". Si la JMJ se queda en una experiencia bonita no servirá para nada. Testimonio, "haced lio", "callejear la fe", difundir la buena noticia, moverse... Se dice de muchas maneras, pero hay que hacerla.
Pero tiempo al tiempo. Aunque hay que saber planificarse y proyectarse en el futuro, también los romanos dijeron Carpe Diem. Si queremos llevarnos algo de aquí, habrá que vivirlo. Disfrutemos de estos últimos días, que aunque tienen sabor a final, el postre esta muy bueno, y son también el principio de algo nuevo. Seguiremos en contacto, os transmitiremos lo que aprendemos y lo que vivimos, lo que compartimos, y lo que los eventos inesperados y la providencia nos deparan, abiertos y con calma, para aprovechar al máximo estos días.
Gracias. 
Aquí Diego. Cambio, y Corto.